¿MARAS?

«Edgar Morin propone regenerar la tierra en base a seis principios; uno de ellos es el principio del salvataje por la toma de conciencia» y como dijo el poeta Holderling; “donde crece el peligro crece lo que salva». Tierra patria.

Las Maras son agrupamientos violentos, organizados, juveniles, contratados o como apéndices del crimen organizado.

Hay fenómenos que nos preocupan. Necesitamos, quizás,  pasar de la pre-ocupación a la ocupación. Mi horizonte de percepción de esta realidad es el trabajo preventivo en las comunidades y la escucha de pacientes y familias. Me duele como profesional de la salud mental y ciudadano lo siguiente: niños consumidores en contacto como correos de «dealers” mayores, violencia escolar, “barras bravas” por doquier en los barrios, tribus urbanas; algunos menores son “satélites” de los narcos para avisar la presencia policial. Fenómenos de “favelización” (esto sucede en Río y San Pablo). La ”sociedad” narco emplea menores y en una verdadera maniobra de reingeniería social les brinda pertenencia, identidad y trabajo remunerado además de la dosis diaria que asegurará la servidumbre al poder bestial de los nuevos dueños de territorios.

El menor “satélite” es habitualmente un desamparado; tragedias familiares lo circundan, abusos sexuales lo expulsan de la casa.

Así surgen “patotas” por doquier con distintos patrones de turno. Refugios o túneles en donde el vacío del desamparo se coloca la mascara del violento. Luego el patrón del territorio y las drogas se ocuparán del resto. El patrón desde la inoculación del miedo bordeando siempre el horizonte de la tortura; la droga asegurando la compulsión por ende la servidumbre.

También las comunidades tienen inmunidad como los organismos. Tener inmunidad en lo biológico es resistir y reaccionar frente a virus y bacterias. Hay también una inmunología social. Protección de la comunidad ante fuerzas que la destruirían. El capital social y el capital humano son los antígenos que protegen la vida. Capital social o sea instituciones cercanos enlazadas y protectoras transversalmente unidas por valores y disminuyendo los disvalores. Capital humano o sea familias nutricias y escuelas contenedoras. ¿Fallamos en todo esto? Parecería que sí.

La epidemia (epi= sobre; demos= pueblo) se apodera de las comunidades. Ya no de gripe sino de violencia. Contagio de grupos de ideales violentos. Fallaron los sistemas de la inmunología social. Si se extiende es pandemia pero ya hay sectores endémicamente afectados. Endemia (en= dentro; demos = pueblo). Hay ya población crónica y que la cultura (cultivo) narco (de la muerte) utiliza. Los patrones de los territorios lo manejan. Así la violencia se aprende. El ideal violento se transmite como una virosis. Toda conducta que tiene éxito intentará ser repetida si no es sancionada.

¿Hay condiciones para la efervescencia de las maras? Parecería que sí. Desamparo de menores, oferta de drogas y organizaciones delictivas; ya están.¿y cual es nuestra respuesta? ¿Nos ocuparemos?