Mitos de la marihuana.

“Vamos a romper los mitos existentes  alrededor del consumo del cannabis”

Ministra de Sanidad. España. Elena Salgado.

En pocos días en el mundo se conmemora el día mundial de  lucha contra las drogas y su tráfico ilícito. El 26 de Junio en todos los  países se hablará en distintos tonos de la epidemia que hoy es un problema  sanitario con consecuencias diversas en el campo de la calidad de vida. Me  pareció conveniente comenzar una serie de notas dirigidas a recordar esta  fecha. España es un país que se ha caracterizado en los últimos años por una  política activa en la asistencia al adicto a través de su Plan Nacional de  Drogas que es un verdadero modelo en red en todas las autonomías españolas.  Además en lo preventivo ha tratado de instaurar servicios de ayuda telefónica  al usuario de drogas, y un trabajo no masivo pero sí selectivo en las escuelas  y comunidades.
Pero en lo referente al uso de la  marihuana su política ha sido claudicante y cambiante distinguiéndola de las  llamadas drogas “duras”; cocaína, heroína. La marihuana pasó a ser considerada  una droga “blanda”, de menores efectos tóxicos y de escasa incidencia  sanitaria. La realidad ayudó a romper con esta imagen y la propia Ministra de  sanidad Elena Salgado y la   Directora del Plan Nacional de Drogas Carmen Moya están  tratando de torcer esta política que ha tenido nefastas consecuencias. Esto, en  nuestro país adquiere vigencia porque la política liberalizadora en España fue  tomada como un espejo a imitar por ciertos grupos privados y comunicacionales.  A fines de Marzo ambas funcionarias elaboraron un Primer Informe de la comisión  Clínica sobre el Cannabis (marihuana) del Plan Nacional de Drogas. Los  resultados más relevantes son los siguientes:

  1. Tenemos que  romper los mitos existentes entorno al cannabis y de este  modo incrementar la percepción de riesgo  asociado a su consumo.
  2. La no percepción del riesgo ha aumentado del 70 % en  1996 al  36,9 en 2006 y está vinculado a  la idea del cannabis como sustancia vinculada al ocio, “al fin de semana”  Mientras tanto la percepción del riesgo al tabaco “subió al 80%” Esto es  claramente el resultado de una política de salud: Se valoró el daño sobre la  salud pública del tabaco y se minimizó el uso de la marihuana. Las consecuencias  están a la vista.
  3. El aumento de consumo de marihuana fue seguido de  esta baja de percepción del riesgo; se ha comprobado que los que fuman más de  tres cigarrillos al mes corren serios riesgos de producir una dependencia. Hay  400 mil menores de 19 años en contacto con esta sustancia y el 10 % o sea  40.000 están acudiendo a los distintos sistemas de atención por las  consecuencias derivadas de esta adicción.
  4. El consumo de marihuana se ha duplicado en los  últimos 10 años pasando del 18, 2 % en 1.994 de la población juvenil al 37  % en 2004.
  5. El estudio del Plan Nacional de Drogas Español  no deja dudas en lo siguiente: a) su uso está  en el origen de los trastornos psiquiátricos que padecen los consumidores; el  riesgo de padecer enfermedades mentales graves como una psicosis se triplica  con el consumo de marihuana, b)el abandono escolar es muy claro comparando la  población que consume cannabis con la que no consume. La primera tiene una tasa  de abandono del 22,5 % frente al 3,5  %  de la otra población. c) Los accidentes de tránsito es entre tres y cuatro  veces superior en los consumidores con riesgo de hospitalización y muerte. d)  la marihuana tiene, además, el efecto de “puerta de entrada” a otras drogas; El  92 % de los que consumen marihuana también toman alcohol, el 69 % tabaco y el  14 % cocaína. La mayor parte de los adictos a la cocaína y a la heroína ha  comenzado con la marihuana. Los datos siguen en otras áreas.

Creo conveniente  que reflexionemos sobre estos datos porque en nuestro país parecería que  triunfa la idea de la no nocividad del uso recreativo. En España están  dando  ya la vuelta. Nosotros insistimos  y con razón, en el tabaco y nos olvidamos de la droga de iniciación fundamental  junto con el alcohol y los inhalantes que   es la marihuana. Hoy la batalla de las drogas es la de la opinión  pública y como se crean las representaciones sociales de la inocuidad del  consumo o de los daños a la salud de la comunidad, especialmente para  los jóvenes.