NARCO… TIZADOS (II)
«La tragedia es precisamente el recuerdo de una fuga imposible…»
G. Maci. Psicoanalista. Libro: Yo-Yo mismo
Vivimos rodeados de tragedias. El asunto es que muchas se podrían impedir. La palabra ausente es en todo este tema la palabra prevención, que es de alguna manera ver con anticipación. Para prevenir hay que superar la barrera de la hipnotización social; proceso éste originado en la negación de la realidad y que implica postergar definiciones que más tarde o más temprano tendremos que asumir. Hoy las tragedias están muy vinculadas con el abuso de alcohol y el consumo de drogas en avance creciente. Así como se enfrentaron intereses fuertes en derredor de las tragedias cotidianas ligadas a las consecuencias del tabaquismo; tambien habrá que posicionarse frente a este otro tema.
La realidad manda: tenemos el más alto grado de mortalidad vial del mundo con el promedio de 26 muertos cada 100.000 habitantes superando a México, Brasil, etc. El 85% de los accidentes mortales es debido a fallas humanas, en donde el alcohol y las drogas al volante es un elemento fundamental.En nueve días de Enero hubo 36 accidentes en la ruta 2 , que es casi todo el porcentaje de Enero del 2006.De 7 a10.000 argentinos mueren por año en accidentes de tránsito. En Mar del Plata y en los puestos de control de las rutas interbalnearias el 25 % manejaba en niveles críticos de alcoholemia y el 70% a la salida de las diversiones nocturnas. La «narcotización» y la hipnotización social máxima es prever premios para el sobrio. Es casi como tomarnos en broma un dato dramático de la realidad o confundir la realidad con un programa de televisión de apuestas o con un bingo. Es negar que ha cambiado la curva de la normalidad (curva estadística que mostraría que el mayor porcentaje es de sobrios y solo en los extremos se encuentran los abusadores, en este caso de
alcohol).Se ha «normalizado» el abuso de alcohol unido al manejo de vehículos en general.
¿Que hacemos para modificar esta dramática realidad?.¿Apelamos a la cultura de mercado y premiamos al sobrio? ¿Porque no educamos y a la vez nos atrevemos a confrontar con los intereses en juego?.Mientras tanto a muchos se les ocurre ocultar la fuga(a través del alcohol), garantía certera de una próxima tragedia.
Por otro lado en la ciudad, un grupo de padres con un cartel en mano nos recuerdan la tragedia de la escuela ECOS en donde mueren nueve estudiantes embestidos, mientras viajaban en un viaje de estudios, por un chofer alcoholizado que manejaba un camión, en Octubre del 2006 tratando de elaborar un duelo casi inelaborable. Acá la tragedia nos recuerda la fuga imposible de la que nos hablaba el Prof. Maci. La tragedia de ECOS parte de este drama cotidiano que no asumimos.
Prevenir implicaría luchar para detener las tragedias. Mientras tanto en el 2006 aumentó el 30% de consumo de bebidas blancas (de alta graduación alcohólica y que encontró el mercado juvenil tan afanosamente buscado).Los niveles de abuso de alcohol son marcadamente altos. El consumo de cocaína en menores (estudiantes secundarios) es el mayor de América. El «paco» es un elemento dañino para sectores empobrecidos y es una verdadera pandemia y generadora de discapacitados cerebrales y sociales crónicos.
Así habrá muchos ECOS que retornarán como «tsunami» social o sea como tragedia. La narcosis en las sociedades puede llegar a ser un fenómeno colectivo. Es cuando no podemos mirar a nuestro alrededor o escuchar los datos de la realidad. En griego narco deriva de Narciso, aquel que solo podía mirarse a sí mismo en forma embelezada y a quien la tragedia lo marcó: murió amando su propia imagen confundiendo el espejo con la realidad. No ver o no escuchar tiene el precio de la muerte. Por eso los griegos ponían la flor del narciso en las tumbas. Esta flor era el símil de la muerte. Como sociedad morimos cuando no podemos trascender nuestra mirada interesada. Es ya la narcotización social.
De esta manera todo drama se puede transformar en tragedia. Las sociedades maduras tratan de prevenir las tragedias: hay ciertos indicadores de riesgo que la marcan(el induce de alcoholización, por ejemplo).
La prevención es un sistema y es sistemática. No es una campaña de verano , es un programa permanente. De lo contrario servirá para llenar las alicaídas tapas de los diarios que en verano parecerían estar huérfanas de noticias.
La prevención es un modo de vida al servicio del cuidado de la vida. Comienza con los padres y con la familia en general de los chicos, sigue en la escuela y permanentemente con los medios de comunicación como aliados.
La prevención es , hoy, originar unos sistema de inmunización social como un símil de los sistemas inmunológicos biológicos que tenemos los humanos para defendernos de los virus y bacterias. Hoy las epidemias son sociales y hay siempre una sociedad «hipnotizada» que las promueve. Las vacunas son sociales, comunicacionales, educativas, comunitarias.